El concejal socialista en el Ayuntamiento de Alicante Jorge Espí insistió ayer en el peligro que supone para los peatones los carriles-bici elevados que se están instalando en algunos barrios dentro de la red ciclista de Alicante y que han provocado numerosas caídas entre vecinos del Pla. Espí dijo que estos bordillos son "perfectamente normativos" pero a la vez "inadecuados" para el casco urbano. "En la playa de San Juan están muy bien pero en zonas de mayor densidad de población y tráfico o en el corazón de la ciudad son un gran problema", apuntó.
Los socialistas aseguran que son mucho más recomendables en estos puntos la pintura antideslizante en el suelo o la instalación de balizas de plástico, "así el ciclista tiene un espacio delimitado pero también puede cruzar el ciudadano". Espí recuerda que estos carriles segregados, que tienen una altura de unos 15 centímetros, finalizan en vértice, lo que incrementa el peligro para peatones, ciclistas y motoristas.
El grupo en la oposición presentó al último pleno una iniciativa reclamando una solución a este tipo de carriles-bici tras las caídas de ciudadanos "pero Juan Seva -concejal de Tráfico y Transportes- dijo que no se iba a adoptar ninguna medida. Si un ciclista se cae y se da en la espalda con ese bordillo se puede quedar inválido. Queremos denunciar el pasotismo del grupo de gobierno en este tema". Los socialistas anunciaron ayer que insistirán en que se adopten medidas y no descartan movilizarse.
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